¿Estás conforme con tu cuerpo? ¿O te sorprendes a ti misma siempre exigiéndole más y diciendo una y otra vez lo feas o desagradables que son algunas de las zonas de tu cuerpo?
Entonces no dejes de leer el post de hoy, ¡Es especial para ti!
Estar conforme con el cuerpo
Cada vez es más agobiante la cantidad de falsapublicidad que tenemos bombardeándonos de forma constante, para hacernos creer y mostrarnos lo que se supone “Es un cuerpo perfecto” y como deberíamos lucir en base a ello.
Cada vez que veas un anuncio del estilo, recuerda lo que viene a continuación:
¿Eres contigo, igual que con tus mejores amigas? Seguro que no. No creo que a ninguna de ellas le digas las cosas que te dices a ti misma, como por ejemplo: Uyy, que horribles tienes las piernas, llenas de celulitis y varices…
¿Cuántas veces te has detenido a pensar en todo aquello que eres capaz de hacer gracias al cuerpo que tienes?
Desde levantarte e ir andando a buscar una manzana, hasta viajar y recorrer los paisajes más hermosos del mundo; para eso tienes un vehículo, ¡Tu cuerpo!, te lleva y responde sin pedirte nada más que un poco de cuidado saludable.
Enumera tus cualidades
Toma un folio y comienza a escribir todas tus virtudes, por ejemplo: Soy una persona sincera, soy buena madre, soy divertida… Y ¿Te parece que el hecho de que tengas flacidez en el abdomen o abdominales sin marcar, harán la diferencia?
Hace cuánto que no te dices cosas bellas
O que no te haces un regalo sin razón alguna o te miras con amor, o te dedicas un tiempo especial solo para ti.
Tener el peso ideal, es una cuestión de salud a lo que se socialmente se le añade un componente estético, sin embargo puedes ser un palillo y estar muy enfermo. ¿Por qué no enfocarnos en el bienestar y la salud en vez de hacerlo en prototipos inalcanzables y perjudiciales?
Y tú, ¿Cuánto tienes para agradecerle a tu cuerpo hoy, así tal y como es?