Estar con una pareja puede significar sincerarnos y no mentir, pero siempre teniendo en cuenta que no todos los detalles hay que contarlos. Recuerda que del mismo modo que a ti no te apetece saber sus intimidades con su ex parejas y demás, a él tampoco tiene que apetecerle conocer tu pasado sexual, además evitarás posibles discusiones.
El primer punto a evitar es no dar demasiados detalles que puedan mermar la confianza de tu pareja, la seguridad que tenga en sí mismo. Si tu ex era una persona con carisma que caía bien a todo el mundo no es necesario contarlo o alardear de ello o puede que tu nueva pareja se sienta en inferioridad de condiciones.
Recuerda que a tu nueva pareja le importará poco tu ex, así que evita hablar de lo que pasó en tu relación anterior y, por supuesto, recuerda que no será el momento de decir frases como “me rompió el corazón” o lo pasé muy mal por él. Podrás generarle desconfianza y al final son detalles íntimos que sólo te incumben a ti.
Tampoco es necesario que hables de las relaciones sexuales que tenías con tu anterior pareja, es algo de bastante mal gusto y aunque simplemente vayas a decir algo como que no era demasiado bueno en la intimidad, mejor piénsatelo dos veces y guárdatelo para ti.
Por otro lado, si vais a algún lugar en el que hayas estado con tu ex es mejor que no facilitéis ese dato. Puede cortar el rollo y es completamente innecesario. Además piensa una cosa, ¿te gustaría que él lo dijera? Mejor mantén tu secreto a salvo y la velada transcurrirá sobre ruedas.
En definitiva, estas recomendaciones son solo aquellas cosas que a nosotras tampoco nos gustaría oír de nuestra pareja. Simplemente se trata de no hacer lo que no te gustaría que te hicieran a ti.