Vivir en pareja implica estar de acuerdo en muchas cosas y compartir pero también puede conllevar desavenencias o discrepancias. Si crees que debes decir NO a tu pareja en el terreno sexual o en cualquier otro tema concreto, te contamos cómo hacerlo.
Lo primero que tienes que tener en cuenta es que es fundamental que lo habléis. Si vas a dar el paso pero no sabes cómo plantear esa cuestión, ten presente los contratiempos que implicaría no hacerlo. Al final la insatisfacción o algo que no gusta si se produce de manera repetida puede acabar llevando al hartazgo. Ten confianza en él y háblalo.
Cuando se tenga claro que se va a producir la conversación, lo mejor será que abordes el tema sin ningún tipo de rodeo. Ser claro pero no ser hiriente sería la máxima a seguir a la hora de poner sobre la mesa temas de este tipo. Por supuesto el tono tendrá que estar muy medido, puesto que estamos tratando un tema que puede llegar a molestar o incluso a herir al otro, por lo que un tono amable, cercano y próximo será lo mejor de cara a abordar un tema de estas características.
Explícale por qué no quieres hacer algo que él te pide. Dale argumentos o de lo contrario, hará sus propias cábalas que quizá no tengan nada que ver con la realidad y con lo que tú piensas. Se merece que le expliques tu postura y las razones que te han llevado a tomar esa decisión y a hablar con él. Sólo si todo está claro se evitarán problemas posteriores. Son pasos muy sencillos que harán que vuestra relación no pase por ningún bache y es algo que realmente se soluciona con una buena comunicación y con algo de tacto.