Los virus han llegado a mi casa, media familia está resfriada y esta noche les apetece algo suave y caliente. He pensado en hacer pescado en salsa porque es de muy fácil digestión y aquí gusta a todos, incluso a mi novio, que para el pescado es bastante peculiar.
En un menú equilibrado debemos incorporar semanalmente tres raciones de pescado –blanco o azul- para aprovechar todas sus propiedades.
Ingredientes.
- 600 gramos de lomos de bacalao.
- 1 cebolla.
- 2 dientes de ajo.
- 1 taza de guisantes congelados o de lata.
- Perejil fresco picado.
- 1 cucharadita de estragón picado.
- Harina.
- Aceite de oliva virgen extra.
- Medio vaso de vino blanco.
- Sal y pimienta.
Elaboración.
Pelamos y picamos finamente los ajos y la cebolla para dorarlos en una cazuela durante 4 minutos con dos cucharadas de aceite. Salpimentamos el pescado y lo reservamos. En casa me gusta cortar los lomos en trozos de ración para que sea más sencillo manejarlo.
Le espolvoreamos también con un poco de harina y los ponemos en la cazuela para que se sellen y se quede así más jugoso. La harina que suelte hará que la salsa quede un poco más ligada. Una vez hecho esto, regamos con el vino y dejamos cocer hasta que se evapore el alcohol.
Añadimos las hierbas y los guisantes. Si son congelados, pondremos también un poco de agua y si son de lata, podemos incorporar su líquido de conservación.
Dejamos que todo el conjunto cueza a fuego lento durante 10 minutos, probamos de sal y nos lo llevamos a la mesa.
Servir caliente.
Si te apetece hacer algo diferente y te sobra una ración de esta receta, pon lo que te quede en un vaso de batidora y tritura parcialmente para incorporarlo a una bechamel espesa. De esta manera tendremos unas croquetas perfectas para los más pequeños.